¿La evolución de los teléfonos móviles está siendo demasiado rápida?, cada año tenemos un nuevo producto que mejora al anterior en diferentes aspectos críticos, importantes para nuestro día a día. A algunos les resultará positivo por entender que la tecnología no puede frenar según intereses particulares, a otros nos les parecerá tan bien que su teléfono se quede antiguo pocos meses después de haberlo comprado.
La realidad es que ni una cosa ni la otra, nuestro teléfono móvil va a estar vigente bastante tiempo si lo cuidamos, a pesar de que un modelo que lo sustituye ya esté luciendo en los escaparates. Hasta hace relativamente poco la velocidad de estas actualizaciones venía marcada por la gama más alta de teléfonos de los principales fabricantes.
Características
- Pantalla IPS de 5,3" HD (1280x720)
- Cuerpo metálico ultrarresistente
- Cámara principal 13MP y selfie gran angular 100º
- Sonido envolvente DTS X
- Certificación militar de resistencia y sensor huellas avanzado
- Inteligencia artificial real con LG ThinQ
Hoy en día podemos decir que las familias de teléfonos se actualizan por igual, desde el más asequible terminal de la serie K hasta el portentoso dispositivo de última generación dentro de la serie G o V.
Esto ocurre porque los teléfonos de gamas inferiores cuentan con su propia línea de I+D, tanto en componentes como en desarrollo de software. Suponen el grueso importante de las ventas anuales y se han convertido en una prioridad.
Lo habitual es pensar que las tecnologías se presentan en gamas superiores, en ellas se va amortizando la inversión realizada para luego pasar a formar parte de teléfonos más asequibles. Esto en muchos elementos podemos decir que es así, pero en otros es posible encontrar ejemplos en que el proceso transcurre prácticamente en paralelo.
La cada vez más interesante gama de entrada
La mayor beneficiada de esto es la gama media, actualmente hay teléfonos de la serie Qque no tienen nada que envidiar a los modelos más caros del mercado por la mitad de precio. Para un usuario normal con aspiraciones a más, claramente son la mejor opción.
A la gama de entrada, capitaneada por la serie K, también llegan innovaciones de modelos superiores, pero aquí la prioridad es crear teléfonos muy asequibles. Su motivo para existir es que cualquiera pueda tener acceso a un modelo moderno con el que poder estar conectado y realizar todas las comunicaciones con garantías, con el desembolso mínimo de dinero.
No nos vamos a engañar, comprar un teléfono en cualquiera de los niveles posibles es complicado, la oferta es demasiado amplia y no siempre es fácil identificar qué puntos fuertes tiene cada modelo, o qué es lo mínimo que debemos de tener en cuenta. Vamos a repasar algunas características deseables en los teléfonos más asequibles:
Más memoria y un buen procesador
¿Qué es más importante el procesador o la memoria? Son desde luego, junto a la pantalla, las especificaciones más importantes. Si tuviéramos que tener en cuenta un elemento a la hora de elegir un teléfono asequible, miraría con detenimiento la memoria RAM.
Un teléfono Android actual, que es la única plataforma que te ofrece una buena experiencia smartphone a precio asequible, debe contar al menos con 2GB de memoria RAM. Esa cantidad, presente en el nuevo LG K11, es la que te garantiza la multitarea.
Un teléfono es como un ordenador, está constantemente realizando varias tareas, sea por nuestra cuenta o por su propio sistema de funcionamiento. Tener memoria donde alojar esos procesos es mejor que ser rápido realizando las tareas.
Con eso no desmerecemos la potencia de proceso. Lo ideal es encontrar un teléfono que cuente con un procesador de ocho núcleos con al menos 1,5GHz de frecuencia de reloj.
La pantalla ideal
La pantalla lo es todo en un teléfono móvil actual, es el método de interacción y es donde se representa la información, así que mejor cuanto más calidad y tamaño. Lo ideal en un teléfono de acceso es que se disponga de una diagonal de al menos cinco pulgadas, para que se siga manteniendo un tamaño de producto cómodo para usar con una mano.
La resolución debería ser al menos HD (1.280×720 píxeles), que ofrece un buen equilibrio entre definición y potencia necesaria para moverla. Otro aspecto a tener en cuenta es la calidad del panel, en este rango de precios siempre intentaríamos ir a uno que estuviera confeccionado con tecnología IPS.
La cámara marcará las diferencias
Este es uno de los apartados críticos en un dispositivo asequible, ya que es complicado encontrar una cámara de altas prestaciones con un presupuesto bajo. Diría que es la diferencia más grande que podemos apreciar con un teléfono de gama media o Premium.
El principal problema que va a encontrar una cámara sencilla es la ausencia de luz, si las condiciones son buenas seguro que estaremos contentos con el desempeño de la mayoría de teléfonos. También las escenas en movimiento o la calidad del vídeo suelen ser aspectos complicados de mejorar.
Por esto tenemos que valorar que existen fabricantes que se lo toman en serio y colocan sensores principales con más de 12 megapíxeles – sería el mínimo que estableceríamos – o sistemas de enfoque más complejos que mejoran claramente la experiencia de uso. De nuevo ponemos como ejemplo al LG K11 con enfoque PDAF, basado en detección de fase, algo normalmente atribuible a gamas más altas de teléfonos.
No descuides el selfie
De nuevo esto es una opción bastante personal, pero la realidad es que la “autofoto” es una de las opciones más utilizadas en un teléfono móvil y asegurarte de que tu modelo lo hace bien pasa a ser esencial.
Dos aspectos a tener en cuenta: resolución y objetivo empleado. Una cámara frontal con al menos 5 megapíxeles y un gran angular son las opciones ideales para que todos salgamos en la foto, sin tener que estirar una barbaridad el brazo.
El espacio siempre es bienvenido
Esto depende un poco del uso de cada uno, pero parece claro que cada vez las aplicaciones ocupan más espacio y a poco que usemos la cámara para grabar vídeo y realizar foto, vamos a devorar el espacio disponible para almacenamiento.
En todo caso es justo comentar que hemos vivido una explosión con el almacenamiento: hace menos de una década un teléfono importante nos ofrecía 5MB para guardar datos, hoy es fácil encontrar modelos con 16GB, que diríamos que es la cantidad mínima que debemos elegir.
Aunque es cada vez más complicado, encontrar un teléfono con ampliación de memoria nos soluciona la papeleta en el caso de que seamos muy glotones con la información. LG es de las únicas marcas que ofrece ranura para tarjetas microSD en sus modelos, pudiendo ampliar hasta 32GB.
Bonito pero resistente
A estas alturas de la película no podemos aceptar que el diseño y la calidad estén únicamente disponibles en los teléfonos más caros del mercado, así que vamos a exigirles a los fabricantes la élite en materiales y aspecto.
¿Exceso de plástico? Es lo habitual, pero es posible encontrar teléfonos como el LG K11 que están concebidos con un cuerpo metálico que le da un toque distinción y calidad de otro nivel en su rango de precios. También es valorable que un mismo modelo esté disponible en diferentes tonalidades, de esta forma podremos elegir un compañero de viaje más afín a nuestros gustos.
Por último y no menos importante tenemos la resistencia de un teléfono, así que debemos asegurarnos de que el modelo en cuestión cuenta con algún tipo de certificación o estándar de resistencia. Los teléfonos están siempre con nosotros y están expuestos a mil situaciones de peligro, elegir modelos como el LG K11 con certificación militar de resistencia nos quitará muchos quebraderos de cabeza.
Asegúrate un día de actividad
Aunque es un aspecto que no ha tenido una evolución en horas efectivas, es justo comentar que las pantallas cada vez son más grandes y la potencia claramente mayor. Debemos de dar las gracias a la gestión que hace Android de los recursos, con modos de consumo especiales y un control mayor de los componentes.
Los teléfonos actuales vienen todos con la batería integrada, así que lo mejor que podemos hacer es elegir uno con una gran capacidad: 3.000mAhde batería se nos antoja una cantidad ideal para soportar una jornada de actividad normal.
LG K11, especificaciones de otro nivel
A lo largo del artículo os hemos presentado al LG K11 como mejor ejemplo de teléfono de gama de acceso, por sus especificaciones y diseño. Lo hemos hecho en base a unos criterios generales, pero el teléfono cuenta con aspectos que lo hacen muy especial.
Por ejemplo el sonido, en un teléfono así podemos encontrar un sistema envolvente DTS X, exclusivo en terminales LG. Otro punto a su favor es el sensor de huellas avanzado, colocado a la espalda del teléfono.
¿Cuándo un teléfono asequible es la mejor opción?
Si no eres un usuario que demanda el máximo de potencia ni tienes el presupuesto para acceder a lo más granado del mercado, no te preocupes, los teléfonos de gamas inferiores cada vez son más capaces y están concebidos con el mayor grado de calidad.
No tendrás problema para estar comunicado, acceder a Facebook o jugar a la saga Candy Crush, así que tu bolsillo estará más tranquilo con la adquisición de un teléfono de este nivel.
Otro argumento para elegir un teléfono de gama de entrada son los más jóvenes o los mayores de la casa. Si un adolescente se inicia en el mundo del smartphone, esta inversión puede ser la adecuada.
Imágenes | LG