Podemos hacer la prueba y entrar en decenas de cocinas de nuestros amigos y familiares. Raro sería encontrar una cocina sin microondas, pero más raro aún es usarlo para algo que no sea calentar alimentos. Templar leche, recalentar la comida de ayer, descongelar el pan y un largo etcétera que pasa por dar energía en forma de calor a los alimentos, pero sin ir más allá. ¿Qué hay de cocinar en el microondas?

Ocurre que la mayoría de los microondas han sido diseñados para transmitir calor a los alimentos, pero no para cocinarlos por dentro de manera uniforme y homogénea. Es una ligera pero importante diferencia que tiene su origen en la tecnología. Por ello LG ha lanzado la gama de microondas y hornos microondas Smart Inverter, los únicos que descongelan, calientan y cocinan de manera uniforme.

¿Cómo funciona un microondas convencional?

Corría el año 1945 y Percy Spencer andaba trabajando en magnetrones, un componente usado en el radar de combate. La guerra contra Hitler terminaba y su empresa, que se dedicaba a la fabricación de este invento para los Aliados, buscaba usos alternativos.

La serendipia hizo que Spencer se parase un día frente a un magnetrón activo con una chocolatina en el bolsillo. Se derritió. Al día siguiente, colocó granos de maíz que se convirtieron en palomitas, y el resto pertenece a la historia del microondas.

El magnetrón del microondas genera ondas que calientan el agua de los alimentos

El magnetrón sigue siendo hoy un componente esencial de ese electrodoméstico. Es el componente que transforma la energía eléctrica en ondas de la intensidad apropiada para excitar las moléculas de agua que hay en el interior de los alimentos. El agua se mueve más rápido (se calienta) y calienta a su vez el tejido de la comida que hay a su alrededor.

Es decir, que la energía eléctrica pasa a transformarse en energía en forma de ondas, que a su vez aceleran las moléculas de H2O que transfieren su energía (su calor) al resto del alimento. Como todo lo que comemos tiene un alto porcentaje de agua, el microondas es perfecto para descongelar comida o calentarla. Una vez comercializado, su uso se extendió por todo el globo.

También es muy útil, como sabemos, para calentar líquidos como un vaso de leche o el caldo del cocido de ayer. Pero ocurre que la mayoría de magnetrones está muy dirigidos. Como si de un “chorro” se tratase (podemos imaginar el de una manguera) la energía en forma de microondas llega a los alimentos desde una única dirección y un ángulo muy determinado.

En su momento se planteó la posibilidad de hacer rotar los alimentos para hacer más homogéneo el ascenso de la temperatura. Aunque lo hacía algo más eficiente, esto no solucionaba el problema de que no se puede cocinar con un microondas convencional.

La clave: calentar de forma homogénea

Si algo tienen en común una olla a presión, la sartén o el horno de toda la vida es la forma en que transmiten la energía a los alimentos. Lo hacen de forma homogénea, y esta palabra es clave. A diferencia del microondas convencional, incapaz de redirigir las microondas una vez salen en línea recta del magnetrón, electrodomésticos como el LG Smart Inverter usan la tecnología para calentar uniformemente.

En la imagen térmica de abajo se muestra a modo de ejemplo qué le ocurre a un vaso de leche en un microondas convencional (izquierda), frente a un microondas con tecnología Smart Inverter (derecha). Como puede observarse, el gradiente térmico, representado por un cambio de color, es mucho más amplio y pronunciado en caso del convencional. Más de cuatro veces más desviación de temperatura.

Este gradiente es el motivo por el que en ocasiones, para recalentar un plato como pueden ser las lentejas, haya que calentar, remover, y volver a calentar varias veces. El microondas tradicional calienta solo una parte, dejando a menudo un núcleo frío, a diferencia del microondas mostrado. El origen de este avance, como siempre, radica en el uso de una mejor tecnología y diseño.

Este permite usos antes imposibles, como la inclusión del exclusivo grill de carbón vegetal, que consigue que los alimentos queden crujientes por fuera y jugosos por dentro. Además, ofrece mayor capacidad interior y gratina los alimentos de forma más rápida que el grill convencional. Smart Inverter de LG ocupa menos espacio, ofreciendo un 22% más de amplitud en medidas estándar y una mejor higiene. El interior Antibacterias EasyClean es 2 veces más fácil de limpiar y elimina las bacterias con una eficacia del 99,99%.

¿Cómo funciona un magnetrón capaz de calentar uniformemente?

Podemos imaginar un microondas como una caja en la que se generan una serie de ondas. De hecho, Percy Spencer fue el primero que colocó una caja al magnetrón de su laboratorio. Si dentro de esa caja introducimos comida, esta se calentará, pero solo si el magnetrón mira en su dirección. Incluir muchos magnetrones para calentar la comida desde todas direcciones sería no solo muy caro, sino problemático a nivel energético y de tamaño del electrodoméstico.

La solución a diseñar un microondas caro, poco eficiente y grande es la de usar las propiedades físicas de las microondas de dos modos diferentes. En primer lugar, diseñar un magnetrón capaz de emitir microondas precisas en un haz más amplio. En la imagen de abajo podemos observar en amarillo el magnetrón, generando microondas representadas por trazos blancos:

En segundo lugar, el diseño de nuevos materiales guarda un papel prioritario en esta tecnología. En los microondas tradicionales las ondas generadas llegaban a las paredes del electrodoméstico, donde finalizaban su trayecto. Sin embargo, hay materiales capaces de hacer que las microondas reboten, como lo hace la luz en un espejo, aprovechando la energía sobrante para volver a pasar por el alimento. Esto implica un importante ahorro energético, y por ello se enmarca dentro del reto Smart Green que LG inició en 2018.

Combinando un haz de microondas más abierto desde el magnetrón, y una superficie interior del electrodoméstico capaz de generar decenas de ángulos diferentes, la energía que llega a cada molécula de agua es mucho más uniforme que con métodos tradicionales. En lugar de calentar solo por un lado, calienta por todas partes a la vez y con una intensidad mucho más regular.

Cocinar con un microondas es posible

En otras palabras, ahora que tenemos una herramienta que homogeneiza la forma de calentar los alimentos, es posible introducir materias primas sin cocinar y lograr un acabado similar al que tendríamos en la sartén o la olla. Con la diferencia importante de un menor uso de energía, claro. También de tiempo, y es que los microondas LG Smart Inverter cocinan hasta 1,6 veces más rápido ya que reducen el tiempo de cocción evitando picos de temperatura.

Una cocina tradicional, ya sea de gas, vitrocerámica o inducción, usan un haz direccional para calentar la comida. De abajo a arriba, incluso las ollas a presión (que guardan buena parte de la energía eléctrica en forma de calor) tienen importantes pérdidas de energía y requieren de procesos físicos como la convención para distribuir de manera uniforme la energía.

En microondas como los LG Smart Inverter la energía necesaria para calentar los alimentos no se escapa por mecanismos como la conducción térmica. Además, el alimento no se calienta de fuera a dentro (sartén, olla, horno) sino que lo hace desde el interior, desde cada punto, a la vez.

Esto nos permite preparar recetas rápidas y sencillas y, además, saludables. Ya no hay excusas para no comer sano porque no tenemos tiempo de preparar la comida. Con LG Smart Inverter puedes cocinar sano manteniendo siempre el sabor y los nutrientes de los alimentos ya que evita el sobrecalentamiento y la destrucción de las células de los alimentos y reduce también a la mitad la cantidad de grasa de los mismos. Si buscas formas originales de cocinar, en Microcinando encontrarás recetas al microondas para que puedas cocinar ahorrando energía.

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