Los electrodomésticos hace tiempo que han dejado de ser simples cajas negras. La conexión del IoT, así como clientes exigentes con la durabilidad y el medio ambiente, han dado lugar a que algunas marcas incluyan herramientas que hacen la vida más fácil, como es el caso de LG.
Conexión mediante la app SmartThinQ, con la que podemos controlar nuestros dispositivos, como por ejemplo la temperatura o la congelación rápida en el caso de los frigoríficos; la descarga de programas adicionales; y sistemas de autodiagnóstico que ahorran tiempo y dinero.
Todo electrodoméstico es en esencia un sistema complejo que tiene un fin específico (enfriar la comida, lavar la ropa, calentar la comida…) y la informática actual permite ir más allá en la ayuda al usuario permitiendo que sea el propio dispositivo el que se evalúe y determine qué le pasa, si es que le pasa algo.
Los electrodomésticos del futuro ya están aquí
Cada vez más se entienden los electrodomésticos como dispositivos conectados. El microondas ya no es solo un microondas: es un dispositivo con magnetrón capaz de preparar comida. La lavadora es un dispositivo con tambor incorporado que mantiene limpia la ropa, y el frigorífico es un dispositivo con un compresor que permite el enfriado.
Los chips se han abaratado y el IoT ha entrado en nuestros hogares en forma de aparatos útiles con los que ya estábamos familiarizados, ahora conectados mediante plataformas como SmartThinQ y capaces de comunicarse entre sí a través de dispositivos como el televisor o los altavoces inteligentes como el LG WK7, entre otras conexiones.
Por descontado, han llegado con mejoras de eficiencia y seguridad con respecto a generaciones anteriores, especialmente ante un mal uso por nuestra parte. La Smart Diagnosis de LG puede detectar comportamientos que reducen la vida útil del aparato y atajarlos antes de que el problema sea grave.
No hablamos de electrodomésticos que se estropeen y por lo tanto requieran atención constante, sino de dispositivos conectados que “saben” cuándo algo no va bien y avisan antes de que un problema pueda ocasionar un daño permanente. Es decir, hablamos de electrodomésticos que duran más. Pero pongamos algún ejemplo de esto para poder entender bien este matiz.
Así funciona la Smart Diagnosis (ejemplo real)
Unos días después de instalar nuestro nuevo frigorífico LG Combi con fabricador de hielo nos damos cuenta de que algo pasa. No sabemos exactamente qué, pero la impresión que da es que algo no va bien con el frigorífico. El hielo tarda mucho en fabricarse y sabemos que no es una situación normal.
Como los usuarios no somos técnicos tampoco podemos hacer mucho más aparte de llamar al servicio técnico. En electrodomésticos no conectados este hubiese sido el primer paso, pero en electrodomésticos que habitan el universo del IoT primero ejecutamos la función de autodiagnosis o Smart Diagnosis.
Para ello abrimos la app SmartThinQ y ejecutamos esta evaluación. Seleccionamos el frigorífico, pulsamos opciones y Smart Diagnosis. Como resultado en pantalla nos aparece el problema más probable: resulta que entra poca agua a la máquina de hielo. En un par de minutos revisamos la llave de entrada y nos damos cuenta de que estaba a medio abrir. ¡Problema resuelto! Merece la pena destacar cómo hemos ahorrado tiempo y dinero al no recibir la visita del servicio técnico y haberlo solucionado directamente.
Cuando el usuario puede solucionar el problema
Aunque el ejemplo del grifo de agua medio cerrado parezca demasiado simplista, es un clásico y puede tenernos un rato dando vueltas alrededor del frigorífico, preocupados porque no funciona algo cuando en realidad el problema ni siquiera estaba en la máquina. Lo importante de este ejemplo y el que ponemos a continuación con una lavadora es que el usuario es capaz de solucionarlo.
Tras varios años con una lavadora ecoeficiente de LG nos damos cuenta de que esta se para a mitad de lavado. De nuevo, no somos técnicos y no sabemos qué ha podido ocurrir. La alternativa es llamar al servicio técnico, que vengan, nos arreglen el problema y nos dejen una factura por desplazamiento. De modo que sacamos el móvil, seleccionamos Smart Diagnosis a través de la app Smart ThinQ y esperamos el resultado.
Este tarda segundos en aparecer en pantalla, y nos llevamos las manos a la cabeza. ¿Cómo no habíamos llegado nosotros a la conclusión? Tocaba limpiar los filtros, algo en lo que probablemente ni habíamos pensado. Se trata de una tarea de mantenimiento que podemos hacer nosotros en casa sin problema y que resulta indispensable para el buen funcionamiento de la lavadora.
Un buen mantenimiento alarga la vida de los electrodomésticos
La mayoría de los problemas que detecta la Smart Diagnosis son así de básicos y comunes: tubos de entrada de agua ligeramente doblados, filtros sucios, puerta ligeramente abierta, algún cortocircuito, problemas en el suministro de agua o cables conectados a medias. Se trata de problemas que, de no atenderse, podrían minar la vida útil de electrodomésticos.
Los frigoríficos de LG tienen una garantía de 10 años en su compresor Inverter Linear Compressor, y es que han sido fabricados para durar. Conectar el frigorífico al IoT y pasarle de vez en cuando la Smart Diagnosis desde el móvil nos ayudará a que el resto del electrodoméstico dure tanto o más que esta pieza de tecnología que ayuda en el ahorro energético.
Después de todo, cuanto antes resolvamos un problema leve, menos probabilidades hay de que este pase a ser moderado o grave. Con la atención adecuada nuestro electrodoméstico puede durar muchos años y continuar siendo ecoeficiente, dos vías fundamentales en línea de la política medioambiental de LG y su reto Smart Green. Cuanto más dure un dispositivo menor será nuestra huella ambiental.
Todo empieza por un hogar conectado
La Smart Diagnosis comienza en el uso de herramientas como la app SmartThinQ de LG y un hogar conectado. Este es el pilar básico para que la atención del servicio técnico, combinado con el autodiagnóstico y nuestras habilidades personales, sean capaces de resolver el problema al menor coste posible para nosotros. A veces en tan solo unos minutos.
La idea de tener un hogar conectado con asistentes como Google Assistant es la de llevar una vida más confortable. Delegar los problemas a las máquinas y a los expertos, y dedicar tiempo a lo verdaderamente importante: nuestra familia, ocio, hobbies, etc.
Así, un usuario de frigorífico LG Combi puede seleccionar la temperatura objetivo desde su teléfono incluso a cientos de kilómetros de distancia mientras vuelve de vacaciones, o programar el siguiente lavado para que esté listo en el momento en que llega a casa. El hogar conectado hace la vida más fácil.
Imágenes | LG
