¿Llevas meses pensando en cambiar de televisor? Puede que seas de los que espera hasta comparar bien los distintos modelos y elegir. O quizá aproveches las Navidades para darte un capricho o regalarle a alguien cercano ese televisor perfecto. Los motivos para dejarnos caer por nuestro comercio (online o físico) de confianza durante las Naavidades son variados.
Uno de los productos estrella de cada Navidad son los televisores. Y, en concreto, los paneles OLED. Sus características los convierten en un producto codiciado por los amantes del audiovisual. Además, los televisores LG OLED son los primeros con inteligencia artificial real gracias a la tecnología LG ThinQ® AI y la integración en la plataforma WebOS de Google Assistant, lo que nos permite hablar directamente con el dispositivo.
Pero no todos los OLED son iguales. Hay una serie de características que hay que tener siempre en mente. Sobre todo, para dar en el clavo con el tipo de televisor que mejor se adapta a lo que buscamos durante estas Navidades.
1. La potencia, siempre con control
A la hora de comprar un televisor online es difícil apreciar las diferentes sensaciones que produce su imagen. Pero hay ciertos datos que traducen los colores, el brillo y la nitidez a números. Por ejemplo, los televisores OLED tienen hasta 33 millones de píxeles. Son 33 millones de puntos de luz coordinados para dar la mejor imagen. De hecho, según un estudio realizado por la Universidad Complutense en 2016, mejoran un 33% la percepción sensorial frente a un televisor LED.
En un panel OLED, cada uno de estos puntos de luz se maneja de forma individual. A esto le sumamos otras tecnologías como HFR (high frame rate), color HDR Total, 4K o sonido Dolby Atmos, alcanzamos televisores como el OLED65E9PLA de LG. Además de una navegación fluida por la interfaz Smart TV y una inteligencia artificial integrada. Demasiada potencia como para dejarla sin control.
Así, a la hora de decidirse por un televisor OLED hay que fijarse en el cerebro que coordina todos estos elementos. Es decir, el procesador. Sobre este chip (Alpha 9 en LG) recae la tarea de analizar, limpiar y mejorar cada imagen. ¿El objetivo? Lograr una mayor calidad global. Algunos son procesadores como los de un ordenador, con una unidad central de procesamiento, una unidad de procesamiento gráfico y memoria DDR.
Como adelantábamos, los televisores OLED de LG incorporan el procesador Alpha 9 (α9) capaz de procesar datos de hasta 14 bits. Este consigue ejecutar cuatro pasos de reducción de ruido, acentuar la nitidez destacando los detalles, procesar colores más reales, identificar y resaltar los primeros planos y trabajar con señales de hasta 100 fotogramas por segundo (fps) en HDR, lo que se conoce como vídeo HFR.
2. No todos los HDR son iguales
Otra de las claves a la hora de invertir en un televisor es conocer su compatibilidad con los formatos de contenido con más calidad del mercado. Cuando hablamos de color, esto pasa necesariamente por tres siglas: HDR. El rango dinámico mide la distancia entre las zonas oscuras y las más iluminadas de la imagen. Cuanto mayor sea la calidad del detalle en los negros y los blancos, mejor.
El HDR o color de alto rango dinámico es una característica del vídeo o de la fotografía. Es decir, no tiene que ver tanto con el televisor sino con la forma en que se ha producido el material audiovisual. Sin embargo, es el fabricante del televisor el que se asegura de que el dispositivo tolere los diferentes formatos de HDR. y sí, hay varios y no todos son iguales.
Los nombres pueden ser distintos entre marcas, pero hoy tenemos cinco formatos de HDR utilizados ampliamente por las productoras. Son Dolby Vision, HDR10, Technicolor, HLG y HDR Converter. El HDR10 es el más extendido y trabaja con 10 bits de color. El HDR de Dolby llega a los 12 bits y 10.000 nits de brillo. Cada HDR tiene sus características. No son excluyentes, pero que un televisor soporte un formato tampoco quiere decir que los soporte todos. Salvo un OLED de LG, preparado para reproducir todos los HDR del mercado. Es el caso del televisor OLED65E9PLA, que incorpora el uso de inteligencia artificial para mejorar el brillo (Brillo IA).
3. Busca el negro puro
El color blanco es la superposición de todos los colores. El negro es la ausencia de luz. Entonces, ¿por qué un televisor muestra un tono grisáceo, más o menos oscuro, cuando debe mostrar oscuridad total? La mayoría de televisores en el mercado integran un panel de retroiluminación LED. Esta tecnología ha mejorado mucho gracias a avances como Nanocell.
Sin embargo, es inevitable que se produzca cierta contaminación lumínica en las zonas más oscuras de la imagen. La tecnología OLED, por otra parte, elimina este panel de iluminación. Cada uno de los píxeles de la pantalla es un diodo orgánico de luz que trabaja de forma independiente y puede permanecer sin activar. Es decir, se ilumina solo si tiene que mostrar color. Y se apaga si tiene que mostrar la ausencia de luz.
Los televisores OLED de LG ofrecen el ansiado negro puro. A partir de él, se construyen muchos de los factores que influyen en la calidad de imagen. Niveles de negro más profundos le dan mayor profundidad a la imagen y hacen que el resto de colores luzcan más brillantes por contraste. Además, eliminar un panel de retroiluminación significa televisores más finos (algunos, incluso más delgados que un smartphone).
4. Mide la inteligencia del Smart TV
Un televisor nuevo, hoy, suele ser smart. A nivel mundial, casi siete de cada 10 televisores vendidos en lo que va de año fueron Smart TVs. Estos van desde televisores con conexión a internet e interfaces lentas e inseguras hasta dispositivos que dan sus primeros pasos en el reino de la inteligencia artificial.
El sistema operativo WebOS 4.5, integrado con la tecnología ThinQ™ de inteligencia artificial del televisor OLED65E9PLA, es la base de todos los televisores LG. Es rápido y personalizable y, además, está certificado por UL, lo cual garantiza que es un sistema seguro frente a ataques de la información personal del usuario. Además, las versiones de WebOS 4.0 o superiores, instaladas en todos los televisores OLED, soportan plataformas abiertas como Google Assistant.
¿Y qué puede hacer por nosotros un Smart TV con inteligencia artificial real? Puede proponer canales o contenido en función de los intereses del usuario. Cambiar de cadena o ajustar los parámetros de la pantalla para disfrutar de una película o un partido de fútbol. Puede controlar las luces del hogar, proporcionar información meteorológica o pedirnos un taxi. Y lo mejor es que solo necesitamos pedírselo mediante una conversación natural.
5. Nunca olvides el sonido
Una buena experiencia audiovisual se sustenta tanto en el apartado visual como en el de audio. El sonido es clave para disfrutar del cine, una carrera de Fórmula 1 o nuestra serie favorita. Los televisores OLED de LG son los únicos con el sistema Dolby Atmos integrado, un sistema que ni tan siquiera está instalado en todas las salas de cine.
La tecnología desarrollada por Dolby es capaz de analizar el sonido de cada elemento de la imagen y crear objetos sonoros en tres dimensiones. Estos se posicionan después en los planos vertical y horizontal generando una sensación envolvente, de 360º. El sistema Dolby Atmos puede estar integrado en el televisor o en forma de barra de sonido independiente, como en los modelos OLED extraplanos de LG.
OLED es una de las tecnologías más vendidas a nivel mundial. La inteligencia artificial, el negro puro, la potencia de procesamiento de imagen, su soporte de HDR y el sistema Dolby Atmos juegan a su favor. Optar por ella es siempre una buena opción estas Navidades.
Imágenes | LG